10.3.10

Magia

- Sólo hay una cosa que me parezca más bonita que la magia de esta cita, -decía dándole cierto énfasis al pareado tonto que se me acababa de ocurrir. Me movía como el Maestro de Ceremonias de una obra de teatro que se había convertido en burla...
- ¿Me vas a recitar poesía? -sonreías con picardía. Era una broma, pero en tus ojos se leía que de verdad lo estabas esperando.
- Simplemente voy a reconocer algo que es un hecho. Y es que lo más bonito aquí es... - fui levantando poco a poco el dedo hasta señalar tu rostro, casi tu hombro. Te lo esperabas, te reíste de mí y estabas a punto de decir que me dejase de tontería- la chica esa tan bonita con falda que está comprando el pan. -te diste la vuelta, y corroboraste que había una chica comprando el pan. Me miraste fijamente.
- Anda, no se puede ser más tonto, joder. - Te acercaste a mi para tratar de empujarme, como venganza; mientras indignada me mirabas con furia. Cuando empujaste mis hombros, aproveché para coger de tu brazo y con un movimiento algo brusco acercaste a mí, hasta rodear tu cintura con los míos.
- Cualquier escusa era buena para que te acercases tanto y pudiese... - la sorpresa impidió que te resistieras al beso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario