Máscara

'No pretenderás que de verdad me lie contigo sin poder ni besarte por la máscara... ¿no?', yo me limitaba a seguir con lo mío, haciendo caso omiso de tus palabras. Estabas cara a la pared mientras yo te inmovilizaba y me acercaba a tu cuello. Levanté un poco la máscara, lo justo para poder liberar la boca para poder recorrer con mi lengua tu cuello. Me movía en círculos, preparando la zona mientras tú tratabas de girar la cabeza y pretendias que parase, creyendo que ibas a convencerme con palabras. Cuando la zona estuvo húmeda y preparada, hinqué los dientes con fuerza. Quería devorarte. Quería oírte gritar. Quería sentir cómo cada parte de tu cuerpo gemía... no sólo tus cuerdas vocales. Mis manos seguían inmovilizando las tuyas, y mi cuerpo te acercaba más aún a la pared; quedando prácticamente inmóvil. Fui recorriendo tus brazos hasta llegar a tus hombros, y bajé poco a poco por tu costado llegando casi al vuelo de la faldita que llevabas. 'Anda, estáte quieto Gino...'. Levanté la vista, mirándote fijamente. Con una mano recoloqué mi máscara. 'No te confundas... yo ahora sólo soy tu fantasía sexual, ni siquiera tengo nombre'. Una de mis manos te rodeó la cintura y te apretó contra mi, haciendo inevitable que sintieses mi erección. La otra mano estaba en tu trasero jugando, colándose con delicadeza bajo la falda para no llamar la atención del resto de la humanidad que se encontraba tras nosotros... me dejé de juegos y busqué directamente tu sexo, necesitaba comprobar si en el fondo lo estabas disfrutando o no. Había sido una noche larga y... francamente, se te notaba con ganas. Me dejé de tonterías. Aparté tu ropa interior, eché un poco tu cuerpo hacia delante, me coloqué detrás tuya y simplemente con levantar un poquito la falda....