7.10.09

Que eso sí que es ser feliz.

Porque estoy cansado de leer ñoñerías. Que yo te ame no significa que deba admirar la belleza de las estrellas y compararlas con tus ojos, ni tengo que tratar de hacer una metáfora con la perla de tus dientes. Que te ame no requiera que tengas que vivir por tí sin tener amor propio, ni tenga que tirarme a tus pies, ni mucho menos que tenga que colgar en tus manos. Como si eso significara algo, joder. Yo te quiero, con locura, y por eso lo que quiero es hacerte gozar. Te quiero tanto que sólo busco que disfrutes de cada instante conmigo. Quiero hacerte gemir, gemir tanto que no puedas compararlo con ninguna otra experiencia hasta ahora. Que te duela la garganta de tanto gemir pero no seas capaz de cerrar la boca. Quiero ver que explotas, disfrutar de tu mirada de éxtasis mientras levanto suavemente mi vista de tu vientre bajo. Quiero devorarte, cada centímetro, y que sientas ese daño dulce que se convierte en placer. Comenzar a morderte la espalda, subir por el costado y escribir con la lengua lo que te voy a hacer.
Que te adore significa que quiero hacerte feliz, muy feliz. Que no sea capaz de caminar a tu lado sin pensar que estoy demasiado lejos de tí, conseguir que cada momento sea una sonrisa y que sólo mueran las sonrisas cuando yo te esté besando. Quiero recorrerte. Que mis dedos se guien entre las curvas de tu cuerpo hasta encontrar cualquier secreto que hayas ocultado al resto. Porque no soy como el resto. Yo te adoro. Te voy a demostrar que una tarde puede dar para mucho. Te voy a agotar, a mimar, a hacer que recuperes las fuerzas y volver a dejarte exhausta de nuevo. Voy a luchar por darte el mejor día de tu vida cada vez que nos veamos; y me superaré, eso te lo aseguro. Quererte no significa que te hable en verso, ni que te compare con un ángel... quererte es desearte como a Venus, vivir para intentar hacerte la vida un lugar más agradable y buscar sorprenderte a cada momento. Besarte. Besarte cada día mejor, besarte hasta que el resto de besos sean una jodida mierda comparada con el mío. Darte la libertad para que puedas demostrar tú misma que el resto apesta, que nadie jamás va a quererte como yo, aunque ellos sí digan que cuelgan de tus manos. Yo te voy a hacer comprender un nuevo estadio del amor. Placer, cariño, risas y... todo lo que pase por tu cabeza. Llegar a conocerte hasta el punto que te sorprenda dándote lo que necesitas sin que lo pidas. Hacer que en tu vida nada sea un puto problema y tengas que inventártelos porque ya no existen. Desearte, y hacerte sentir la mujer que eres. Porque si algo está claro en esta mierda de vida es que eres increíble. Y que, mientras esté en mi mano... te voy a hacer feliz. Como pueda, en la medida que lo logre... eso sí, cuando me des la oportunidad, te voy a hacer gozar. Que eso sí que es ser feliz.

Surth

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